Las comunidades del PP recortan 500 millones de euros en educación(Nº57)

Imprimir
Rafael Gómez Parra
rafa_gomez_parra.jpg
  Varios e importantes Gobiernos Autonómicos del PP –además de CiU en Cataluña y UPN en Navarra- se enfrentan a un otoño caliente en Educación, como consecuencia de los grandes recortes presupuestarios aplicados a la Enseñanza y que, en el conjunto de España, supone una disminución de un 1% (de 52.741 millones en 2010 a 52,254 en 2011), algo que no había ocurrido en los últimos 34 años de “transición democrática” y que indica el camino que quiere seguir el próximo Gobierno de Mariano Rajoy cuando gane las elecciones del 20-N.
  De hecho, hemos pasado de gastar el 5% del Producto Interior Bruto en enseñanza al 4,75%, empujados básicamente por las Comunidades Autónomas donde gobierna el PP, especialmente Madrid, con una bajada de 120 millones, Galicia y Castilla La Mancha, tres Autonomías que han decidido aumentar las horas lectivas de 20 a 22 o 25 y echar a los profesores interinos, que constituían un refuerzo importante.
  Los profesores madrileños, que llevan varios meses celebrando grandes asambleas para denunciar los recortes del Gobierno de Aguirre, han tenido que empujar a los principales sindicatos del sector (CC.OO., STES, ANPE, CSIF y UGT) a una lucha frontal cuyo objetivo final no es el salaro, sino la defensa de la Enseñanza Pública y de los alumnos. Si fuera por las asambleas de distrito que se han celebrado en Madrid –donde se ha criticado mucho a las centrales sindicales- los enseñantes habrían ido a una huelga indefinida, pero los sindicatos han conseguido reconducir la protesta a unos límites más modestos, que puede acabar agotando a los profesores.
  La huelga, que comenzó con una concentración el 14 de septiembre frente al Ministerio de Educación, donde se reunían ese día los responsables de Enseñanza de las Comunidades Autónomas, está yendo unida a paros semanales y a una información constante y masiva a los padres y a los propios alumnos para que entiendan lo que está en juego: la educación de más de ocho millones de alumnos en toda España, que acudirán este año a los Institutos. El conflicto puede extenderse también a la enseñanza primaria y a los colegios de 0 a 3 años.

EN EL FURGÓN DE COLA DE EUROPA
  Los profesores remarcan que en España existe todavía más de un 28% de jóvenes entre 18 y 24 años que no tienen ningún tipo de estudios, lo que demuestra las carencias de la Enseñanza en nuestro país, lo que nos coloca en el furgón de cola de Europa en este sentido, a pesar de que pizarra_kalvellido.jpgtodos los partidos políticos incluyen como estrella de sus programas la necesidad de un incremento de la educación. Esperanza Aguirre no solo ha disminuido el gasto en enseñanza y quiere echar a 3.200 profesores interinos, sino que al día de hoy todos los planes de formación que llevaba el Servicio Regional de Empleo –que borró del organigrama de su Gobierno, de un plumazo, este verano- han quedado suspendidos hasta nueva orden, incluyendo los pagos a las empresas que se dedicaban a esta labor. La medida ha dejado sin futuro a más de cien mil jóvenes madrileños.
  Mariano Rajoy, que sueña ya con convertirse en presidente del Gobierno el 20-N, ha montado su laboratorio de pruebas en Castilla La Mancha, donde gobierno su número dos Dolores de Cospedal, para ir probando algunas de las medidas de recorte social. La presidenta castellano manchega ha dejado de pagar a las personas dependientes, se niega a pagar las recetas de la Seguridad Social, lo que ha provocado un conflicto importante con las farmacias, y ha aumentado las horas lectivas de los profesores –lo mismo que Aguirre en Madrid y Nuñez Feijóo en Galicia-, para echar a los interinos.
  Es importante destacar también que los Colegios Públicos –a pesar del apoyo constante de los Gobiernos del PP y del PSOE a la enseñanza religiosa concertada- acogen todavía al 67,9% de todos los alumnos del Estado, donde se incluye también a los hijos de las personas más pobres y a un 82% de los hijos de inmigrantes, con problemas de idioma incluido. Prueba del maltrato que se da a  los colegios públicos es que la inmensa mayoría de los dirigentes políticos de todos los partidos mandan a sus hijos a los colegios católicos concertados e incluso a los privados, donde estudiar cuesta más de 300 euros mensuales,
  Gran parte de esos colegios concertados exigen a los alumnos, además, el pago de tasas diversas y tienen a sus profesores peor pagados que a los de la enseñanza pública.
  En los últimos años, el Gobierno de Aguirre ha venido concediendo terrenos y licencias de enseñanza concertada a importantes colegios dirigidos por católicos ultras pertenecientes a los Legionarios de Cristo y al Opus Dei. Incluso ha tratado de dar las ayudas públicas a colegios que mantienen la separación entre niños y niñas, algo con lo que se acabó hace más de 30 años incluso en los colegios católicos.

AGUIRRE, EN TROMBA CONTRA LOS PROFESORES
  La presidenta madrileña se ha tomado la huelga de profesores –como hace casi siempre- como un asunto personal y un ataque a la derecha españolista que lleva 16 años gobernando en la Comunidad de Madrid. El secretario general del PP madrileño y ex consejero de Interior, Francisco Granados, ha acusado a los huelguistas –muchos de ellos catedráticos y desde luego con más estudios que la cúpula del PP- de ser unos desarrapados del 15-M, mientras  que la consejera de Educación, Lucía Figar afirmaba que los “indignados” que participan en las asambleas son los mismos que “agredieron a peregrinos”  del Papa.
  La propia presidenta trató de desacreditarlos afirmando que sólo trabajan 20 horas a la semana pero tuvo que rectificar –con la boca pequeña-, aclarando que en realidad su horario es de 36 horas, como todo el mundo en la Administración y que “el que tiene boca se equivoca”.
Durante todo el verano, la consejera Lucía Figar ha estado tratando de romper la unidad sindical y conseguir que algunas organizaciones hicieran boicot a la huelga, aunque al final parece que sólo ha conseguido el apoyo de la USO y de alguna otra pequeña organización sectorial, mientras que el CSIF, considerado como más próximo al PP, ha convocado con los demás. Lucia Figal de Lacalle es hija de Arturo Figar, máximo accionista de Obras Subterráneas SA (Ossa), el líder español en perforación de túneles y pozos de minería, propiedad de la familia, y de Angeles Lacalle de Noriega, hija a su vez del abogado del Estado Gonzalo Lacalle Leloup. La madre de la consejera es íntima amiga de Esperanza Aguirre y miembro del Patronato de CODESPA, actualmente una ONG del Opus Dei, que fue fundada por el ministro de Franco Laureano López Rodó. Entre sus principales actividades está organizar campeonatos benéficos de golf, el deporte favorito de Aguirre. A la entrega de sus premios suele asistir, en representación de la Comunidad de Madrid, Angeles Alarcó, la ex mujer de Rodrigo Rato, acogida por Aguirre tras su divorcio. Todo queda en familia.
  El cerebro de la estrategia de Aguirre en Educación es, sin embargo, la viceconsejera Alicia Delibes, esposa de su jefe de gabinete, Regino García Badell Arias Navarro, sobrino del último presidente del dictador Franco, Carlos Arias Navarro, que en su época de universitario militaba en las filas del anarquismo más duro, partidario de la lucha armada. El problema es que Delibes es, según Aguirre, muy desastrosa al vestirse y cada vez que la ve le hace algún comentario en ese sentido: “Hija, ¿no te podías vestir un poco mejor?” Al parecer, eso ha impedido que la nombrara consejera y pasara a primer plano.